Son muchas las lesiones que puedes sufrir si eres deportista. Todos en algún momento han pasado por una lesión, más o menos grave, que les ha obligado a reducir la intensidad de su rutina de ejercicios e, incluso, a interrumpirla por completo durante un tiempo. Fascitis plantar, esguinces, metatarsalgia, uña encarnada… son algunas de las más comunes, sobre todo en corredores. Y juanto a éstas, la llamada tendinitis de la fascia lata o síndrome de la cintilla iliotibial. Hoy te explicamos en qué consiste esta lesión, cuáles son sus síntomas y qué relación puede tener con la salud de nuestras pisadas.
Para entender mejor en qué consiste esta lesión, veamos primero qué es la fascia lata, dónde se localiza y cómo reacciona cuando sufre una lesión. La fascia lata o cintilla iliotibial es un músculo tensor que se localiza en el muslo, justo en la parte superior y externa y que presenta una forma plana y muy fina. El tendón de la fascia lata es un tendón largo que va desde la rodilla hasta su inserción en la pelvis, recorriendo la parte externa y superior de la cadera. Cuando el tendón que nace de este músculo se irrita o se inflama, aparece un dolor intenso que incluso puede llevar a interrumpir la actividad deportiva por completo.
Hablamos de la llamada tendinitis de la fascia lata, es decir, la inflamación o irritación del músculo tensor de la fascia lata; un músculo cuya función principal es separar y rotar el músculo internamente y favorecer a que podamos flexionar y equilibrar la cadera en el momento en que se produce la carga.
La tendinitis de la fascia lata también es conocida como el síndrome del corredor. Son muchas las causas que pueden provocar la aparición de esta lesión tan frecuente en deportistas. Desde una sobrecarga muscular o un esfuerzo excesivo a la hora de realizar el ejercicio físico, hasta un problema o patología que ya padezca la persona. Pero veamos con más detalle qué factores pueden provocar esta temida dolencia:
Por las características de cómo se produce y actúa la fascia lata, esta lesión es más frecuente en corredores y también en ciclistas. El principal síntoma, como ya hemos dicho, es la aparición de dolor en la parte exterior de la rodilla, provocada por la constante fricción. Este dolor normalmente comienza suave y aumenta progresivamente. Por eso, es importante no descuidar cualquier molestia en la zona y descartar, cuanto antes, que la tendinitis de la fascia lata pueda tener su origen en una mala pisada.
En dePie Clínicas Podológicas estamos especializados en podología deportiva, y en el tratamiento de lesiones que tienen su origen en los pies. La tendinitis de la fascia lata es una de ellas, y para poder diagnosticarla, realizamos un completo Estudio Biomecánico de la Pisada para conocer si el gesto deportivo del corredor está alterada. En este caso, el podólogo recomendará el uso de plantillas personalizadas para correr, hechas a partir de los datos obtenidos del estudio y fabricadas a la medida de cada pie.
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