
QUÉ ES
Podólogo en Valencia: Uña encarnada
Uñas encarnadas, onicocriptosis o uña enterrada aparece cuando la zona que bordea la uña del pie se introduce en la piel, provocando dolor, inflamación, irritación y enrojecimiento. La uña se introduce en los pliegues ungueales laterales.
Las uñas encarnadas son una afección muy común que puede llegar a ser muy dolorosa. Las causas más comunes son los zapatos inadecuados y las uñas del pie que no se arreglan adecuadamente. Por lo general, el dedo gordo del pie es el que más sufre la uña encarnada, aunque puede darse en todos los dedos.
Es conveniente acudir al podólogo ante los primeros síntomas de dolor; ya que si dejamos que vaya a más, puede acabar complicándose con una infección de peores consecuencias. Además, esta afección puede llegar a ser seria en pacientes con diabetes.

SíNTOMAS
- Dolor en el dedo del pie al tocarlo o al caminar.
- Enrojecimiento de la zona alrededor de la uña.
- Inflamación del dedo (engrosamiento del dedo del pie en la zona donde se clava la uña).
- En casos más graves de infección puede aparecer un absceso.

TRATAMIENTO
Tratamiento de las uñas encarnadas en Valencia
El tratamiento de uñas encarnadas debe ser realizado siempre por un podólogo.
- El podólogo, en primer lugar, desinfecta la zona y pasa a eliminar la piel que se ha introducido en los bordes de la uña. Para ello, utiliza herramientas, bisturí y materiales específicos para el tratamiento de la uña encarnada.
- A continuación, realiza una cura completa mediante la aplicación de un antibiótico tópico y un vendaje específico para uña encarnada.
- Con el tiempo, cuando la uña vuelva a crecer, el podólogo realizará el corte de la forma correcta para evitar su reaparición.
En algunos casos, puede hacerse necesario el uso de antibióticos por vía oral, antes y/o después de acudir a consulta del podólogo. En los casos más graves y cuando el tratamiento fracasa, puede plantearse realizar cirugía podológica.
Para evitar las uña encarnadas, escoja siempre zapatos acorde a su talla, ni demasiado pequeños ni demasiado grandes; y corte las uñas en forma recta, dejando visible las esquinas de la uña para que no se claven en la pie.
En la mayoría de casos, se consigue controlar la afección y calmar el dolor mediante este tratamiento; sin embargo, la uña encarnada siempre tiende a volver a aparecer, por lo que es todavía más importante mantener un buen cuidado de nuestros pies y, por supuesto, visitar al podólogo una vez al mes.